EL VENENO DULCE

Azúcar refinado en la alimentación infantil

Consumir más de cuatro piezas de ultraprocesados al día se asocia al aumento del 62% del riesgo de mortalidad. Este es el dato que aporta la British Medical Journal sobre el consumo de este tipo de productos en España y que hace saltar todas las alarmas. Lo más difícil de todo es hacer frente a esta pandemia, porque no es solamente la bollería industrial, sino que también los alimentos de consumo diario tienen un alto contenido en azúcares. 

Para que os hagáis una idea, incluso los productos más inocentes, como los yogures, tienen un alto contenido en azúcares. Esto no ocurre únicamente en España, en otros países como Gran Bretaña también se registran cifras sorprendentes. Existe un análisis realizado por investigadores británicos de las Universidades de Surrey y Leedsde, en el que más de 900 marcas de yogures fueron objetivo de estudio. Solo el 9% fueron clasificados como bajos en azúcares, es decir, que contienen menos de cinco gramos de azúcar por cada 100 gramos. Las cifras son más alarmantes cuando se trata de nutrición infantil: solo el 2% de esos yogures destinados al consumo infantil se categorizan como bajos en azúcares.

Irónicamente, las recomendaciones de consumo de azúcar en niños apuntan a un consumo que no supere los 25 gramos diarios, lo que equivaldría a unas 100 calorías o a seis cucharaditas. Un reto que difícilmente se podría cumplir, ya que con dos yogures para el consumo infantil se roza fácilmente los 22 gramos de azúcar. Por eso nosotros optamos por reducir al máximo la presencia de azúcares, no solo en los productos que incluyen lácteos, sino en todo el catálogo.

Los expertos alertan sobre la falta de conciencia sobre el consumo de azúcar, algo muy habitual en España. Así lo reflejan desde la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición y, añaden, que la falta de legislación es uno de los grandes problemas cuando hablamos de los edulcorantes escondidos.

Snacks infantiles: el paraíso del azúcar refinado

El yogur no es el único alimento que nos puede resultar inocente. Los zumos que acompañan las meriendas y desayunos infantiles que suelen comercializarse con etiquetas de “sin azúcares añadidos”, son una trampa en toda regla. Detrás, en la composición, normalmente llevan algún que otro edulcorante escondido bajo nombres técnicos. Maltitol o sucralosa son dos de los muchos nombres de estos edulcorantes. A la larga acaban dañando significativamente su sistema digestivo y generan mucha más resistencia a la insulina.

Eliminar este tipo de azúcares o edulcorantes, no significa que dejemos de comer dulce. Podemos priorizar otro tipo de edulcorantes con mucho menos impacto en nuestro cuerpo. Este es el caso del Eritritol, el edulcorante más preciado del mercado por su inexistente pico glucémico y por tener un aporte calórico nulo. Además de tener un potente poder endulzante, es el mejor aliado para los diabéticos.

El desayuno infantil, en el que se suele incluir galletas, cereales o productos relacionados con el chocolate, está aún más inundado de azúcar que el desayuno de los adultos. La evidencia la pone la revista Children, en la que demuestra que la publicidad de comida para niños en países mediterráneos supera la media de azúcar recomendada. Los más pequeños comen un 36,2% de estos azúcares, una cifra que supera por diferencia (un 10,2 %) a la de los adultos.

Ofrecer azúcar a los más pequeños de la casa, sin ser conscientes de ello, es algo habitual. Por eso, recomendamos mirar con cautela los ingredientes, los valores nutricionales y los componentes de aquellos snacks que incluimos en la dieta de nuestros hijos. Prioriza aquellos que tengan la cantidad mínima de carbohidratos y, por ende, la cantidad mínima de azúcares y, también, que contenga el máximo de ingredientes naturales.

Te recomendamos algunos de nuestros productos saludables para incluir en la dieta de los más pequeños de la casa y como alternativa a los productos azucarados del mercado: panes de leche (con y sin chocolate), el Molacao y el Fanticao.

Si tus hijos son de los que no se acaban el desayuno a tiempo… puedes preparar su desayuno para llevar con el mezclador más trendy del mercado. Y si lo quieres todo a la vez, puedes llevarte el mezclador junto con el Molacao y 6 unidades de Fanticaos a un precio reducido con el Pack Desayuno. 

Así afecta el azúcar a los más pequeños

La OMS alerta sobre el peligro de un alto consumo de azúcar, ya que puede provocar, en el caso de los bebés, una dificultad en el desarrollo de sus dientes de leche. Además, esto provocará una clara decantación por el consumo de dulces en un futuro, algo que les facilitará desarrollar enfermedades relacionadas con la obesidad.

En cuestión de una década, la obesidad infantil se ha convertido en un problema de salud pública, tal y como analizó la revista médica por excelencia, The Lancet, afecta ya a más de 120 millones de niños y niñas en todo el mundo.

¿Cómo evitamos caer en la tentación?

El precursor de las enfermedades relacionadas con la diabetes, la hipertensión, la obesidad o la depresión es la adicción al azúcar. Cuanto más azúcar consumas, más alto será el pico glucémico y nuestro cuerpo nos pedirá más y más comida. 

Reducir la presencia de azúcar en nuestras ingestas es primordial para incrementar nuestro rendimiento diario y mejorar nuestra salud. Esto se puede conseguir de forma progresiva, sustituyendo los productos con alto contenido en azúcares, por aquellos con ingredientes naturales y con bajo contenido en azúcares añadidos.

Otro ejemplo es el de adoptar dietas low-carb. Estas se alejan de consumir una alta cantidad de carbohidratos para reducir la ingesta de aquellos azúcares que no se encuentran de forma natural en los productos.

Además, el hecho de poner el foco en otros macronutrientes, como las grasas saludables, hace que nuestros niveles de insulina se regulen mucho mejor, evitando picos glucémicos y reduciendo significativamente esa hambre insaciable que produce comer azúcar refinado en exceso.

Así que te animamos a salir de esta zona de confort para que los más peques de la casa descubran otro tipo de alimentación, mucho más saludable y donde el placer está más que garantizado. ¡Todo son beneficios!